lunes, 7 de noviembre de 2011

Por qué son mudos los sordomudos.


Cuantas veces has tenido delante de ti a un amigo o amiga que es muy brillante, tiene muchísimos conocimientos pero no es capaz de transmitirlos o no consigue tener éxito en el trabajo. Es algo relativamente normal en nuestra sociedad, el que la gente se prepare de manera técnica para un trabajo, pero se olvide de lo más importante: EL.

Trabajar hoy día implica interactuar con personas de tu empresa, clientes, proveedores, administración pública y hasta con tu pareja para hacer que tu vida laboral se pueda compaginar con la vida familiar. La parte técnica te soluciona el 90% de tu trabajo cuando empiezas a trabajar y este porcentaje va disminuyendo según van incrementándose tus atribuciones y responsabilidades, llegando en poco tiempo a menos del 20%, por lo que todo lo que has estudiado tan sólo te vale para tener buenos cimientos, el resto lo aportas tu.

Las cosas se complican cuando tienes a gente a tu cargo, ya que cada uno somos de nuestro padre y nuestra madre y has de saber que no va a llover a gusto de todos. También has de entender que se busca crecer como persona y profesional, y eso no lo lograrás jamás si tu equipo no crece contigo.

Toda persona debe conocerse a sí mismo, saber sus puntos fuertes y debilidades, saber cuáles son las actitudes que mejor desempeña y una vez que se conoce, rodearse del personal que mejor le complemente, haciendo con ello que su equipo le mejore y viceversa. Del mismo modo, todo equipo debe crecer y la comunicación es clave en este proceso.


La buena comunicación no te va a eximir de errores o problemas dentro y fuera del equipo, pero si hará que tengas la información y los medios necesarios para afrontarlos.

Por todo ello, la comunicación y el conocernos a nosotros mismos, es tan o más importante como tener una buena preparación o formación técnica.

No hay comentarios:

Publicar un comentario